Naturaleza y política: lo que nos espera

Es primavera en América del Sur. La Naturaleza, ajena a los contratiempos y a las tragedias humanas, se expande con una indiferencia sabia y cruel. Contra todo pronóstico catastrófico florece mi cactus y la gardenia está a punto de abrir sus pimpollos. Contra toda violencia y mezquindad, mi perra me espera con alegría y saltos laterales.

Mientras creemos con total certeza que permanecemos firmes y expectantes, mirando unas elecciones de medio término que hacen tambalear el gobierno de un país presidencialista como Argentina; el Planeta, señores, gira, en nuestra latitud, a setecientos kilómetros por hora. De quietos, nada.

Por estas tierras se suman dolores, se multiplican, se potencian. Abusando de la metáfora matemática, diremos que duele en el cuerpo tanta pobreza, tanta ignorancia, tanto abandono enmascarado de cuidados, tanta impunidad, tanta estafa, tantas muertes innecesarias.

Hace unos días vi un cartel en una marcha de los formoseños que retumbó en mí oído como un vaticinio. Al menos es una advertencia para los poderosos que suelen negarse a escuchar lo que no les conviene. "Nos quitaron tanto, -decía el cartel- que nos quitaron el miedo". Es una forma de decir que ya no se tiene nada que perder y que, por lo tanto, poner en riesgo la propia vida resulta inevitable.

En este contexto, ante la injusticia, la inseguridad, la inflación y la miseria, la tensión social resulta la obvia respuesta de los que más sufren. Medio país es pobre hoy, hay siete millones de desocupados y el dólar se fue a las nubes.

El argentino medio ya no está preocupado por el resultado de los comicios; piensa en el día después, en los dos años que nos esperan. En el seno de la sociedad hay incertidumbre, tristeza y enojo.

Mañana son las elecciones de medio término en Argentina, se eligen un puñado de senadores y diputados. Al día siguiente el gobierno seguirá siendo el mismo por dos años más. Si bien es cierto que estas elecciones son fundamentales para oficialismo y oposición, el ciudadano de a pie intentará ponerle un freno a la mayoría absoluta en ambas cámaras.

Es que el problema por estos lares no es que Argentina tenga elecciones de medio término, lo que Argentina no tiene es término medio.