Hace apenas unas semanas nos sorprendía la noticia del fallecimiento de Nonito Pereira conmocionando medios, redes sociales y al ambiente musical de Galicia en el que Nonito se adscribió desarrollando una intensa y emocionante carrera de difusión a través de programas de radio, prensa, televisión o como disc jockey en aquella juvenil década de los 80 con su explosiva impronta creativa. Querido y admirado por muchos, Nonito ha dejado tras de sí una estela de afectos y agradecimientos a los que se suma como muestra el concierto homenaje celebrado el día 17 en la Iglesia de San Jorge a cargo de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio Superior de A Coruña dirigida por el Maestro Fernando V. Arias, un factótum de la profesión, cuya batuta guio en su día a los virtuosos de Moldova, a la Orquesta de Cámara de Kishinev
además de crear páginas sobresalientes de literatura musical en profusión de géneros y estilos.
El amor a Galicia hace que Arias se establezca con los suyos, entre los suyos, como también supo hacer suyo este homenaje para el que fue su apreciado amigo. Impecable la actuación de la orquesta que muy bien habla de la cantera de músicos que tenemos ahora mismo en nuestra tierra, interpretando dos obras de enjundia: El
Concierto para fagot y orquesta de Carl María von Weber, quien llegó a convertirse hacia 1821 en el compositor alemán de mayor popularidad con su Freischütz y en el que actuó como fagot solista Esteban García Vidal y en la segunda parte la
Sinfonía N.º 3 en la menor de Mendelssohn, obra que transcurre en cuatro movimientos sin interrupción imbuidos del influjo de la música popular escocesa. El lleno absoluto y la respuesta del público con su emocionado aplauso fueron la mejor contestación para el bien hacer de la orquesta, del director y para el recuerdo de Nonito Pereira, quien vivió para favorecer el arte musical. Para él, In Memoriam.
