Mi carta a los Reyes Magos
lunes, 07 de enero de 2019
Tras superar las fiestas y fastos navideños,
con gozo y resignación los mayores
y júbilo y regocijo de los pequeños,
según la tradición es obligado
escribir una carta a los Reyes Magos,
esperando que sus Majestades,
con su generosidad habitual
nos concedan los regalos que vamos a solicitar:
-A nivel local, desde La Coruña:
Pedimos a los Magos, como principal tarea
que baje cuanto antes la Marea,
que de forma brusca e inaudita
invadió la ciudad y llegó a María Pita,
causando un deterioro en la convivencia natural
de esta Ciudad de Cristal, abierta y liberal.
Ni siquiera las tormentas y el nordés
han alarmado tanto al coruñés.
¡! Que baje la Marea, por favor ¡!
y regrese a las playas del Orzán y Riazor,
donde la calma y serenidad del mar,
transmutarán el cambio en paz social
y sumergirán en sus aguas de plata y marfil
el tedioso y fraudulento dillo ti
-A nivel nacional:
Pedimos a los Magos de Oriente
que el Gobierno de la Nación,
resuelva de forma urgente
la esperada exhumación
de los restos inmortales del dictador,
tema que suscita la mayor preocupación
por parte de la impaciente población.
Nos da igual la Moncloa, la Almudena o el Prado,
pero por favor realicen ya el traslado.
Y a continuación formulamos otra petición:
A los infantes de mi generación
como castigo por mal comportamiento
los Reyes nos traían carbón.
Aplicando tan remota tradición
pido a los Magos que castiguen con carbón
a todos los políticos que se han portado mal.
Si en España no disponen de carbón suficiente
pueden traerlo desde Oriente
-A nivel mundial urbi et orbe
A los Magos pedimos con la mejor intención
que desde vuestra potestad real
promováis a nivel mundial
una enérgica revolución moral
para erradicar la codicia y la ambición,
la miseria el odio y el rencor
instaurando en esta infortunada sociedad
un mundo de amor y de amistad,
trocando el puño cerrado
por el abrazo cordial y sosegado.
Y como petición final
os pedimos que el Mediterráneo,
Mare Nostrum, cantado por Serrat,
no se convierta en el Mare Mortis,
sepulcro húmedo y salado
de miles de inmigrantes inocentes
por la terror y la miseria desterrados
Esperamos serenos y confiados
que los Magos nos traigan los regalos
que humildemente les hemos solicitado.
Vázquez Liñeiro, José Ramón
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