Seguramente todos nosotros somos plenamente conscientes, de que nuestra salud bucodental está relacionada directamente con nuestros hábitos y estilo de vida y con el tiempo que dedicamos a la higiene y cuidados de nuestros dientes, entre otras cosas.
Llevar un ritmo de vida poco saludable, que incluya hábitos como fumar, beber alcohol, un consumo elevado de azúcar
puede ocasionar en nuestros dientes la aparición de ciertas infecciones, como caries, la inflamación de las encías o en casos extremos o la pérdida de alguno de ellos por acudir demasiado tarde al dentista.
Es por todo esto, de vital importancia, adquirir ciertos hábitos para disfrutar de una correcta salud dental:
Comer saludablemente. Es importante la ingesta diaria de frutas, verduras y lácteos, ya que estos productos contienen nutrientes esenciales para proteger y mantener sanos nuestros dientes y encías.
Correcta higiene bucal. Para conseguirla, debemos de cepillarnos los dientes al menos dos veces al día, de arriba hacia abajo con movimientos circulares. No debemos olvidar sustituir nuestro cepillo de dientes cada 3 o 4 meses o cuando las cerdas estén desgastadas. El uso del hilo dental también es muy recomendable, pues elimina la placa de los dientes que el cepillo no puede llegar.
Ejercicio físico. Practicar deporte de forma habitual ayuda, además de a impedir la aparición de enfermedades como la obesidad y reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiacas, como todos bien sabemos, a mantener unas encías saludables, debido a la mejora del sistema inmunológico que produce.
Visitar al dentista. Es necesario hacer una visita a una clínica dental barcelona, o de cualquiera que sea tu zona geográfica, cada 6 meses, para realizar una revisión de nuestros dientes. En
Estudi Dental Barcelona, nuestra recomendación como clínica de estética dental, te informarán de todo aquello que necesitas para tener unos dientes sanos, además de ayudarte a tratar y prevenir cualquier tipo de enfermedad bucal. Son una empresa líder en el sector de la Odontología, que cuenta con grandes profesionales y las técnicas más innovadoras.
Una sonrisa saludable es parte de nuestra carta de presentación personal, que dice mucho de nosotros mismos a los demás. Es por eso que la boca juega un rol fundamental en nuestra relación con los demás y en el bienestar general y, por lo tanto, mantener la boca sana es esencial.
Las características estéticas de la boca, junto con la presentación de nuestros dientes, forman parte de nuestra apariencia física y, hoy en día, eso es sumamente importante. Es un componente elemental en la imagen que proyectamos a los demás y, el tener una boca agradable, bien alineada y cuidada, favorece, como hemos señalado, las relaciones humanas y eleva nuestra autoestima.
Dientes blancos, sonrisa perfecta
Tener unos dientes más blancos, al más puro estilo de los actores de Hollywood, es algo que a todos nos gustaría conseguir. Pero es que además es posible, con un buen tratamiento de blanqueamiento dental, como el que el ofrece
bladegrup.com, tus dentistas Barcelona para conseguir aclarar varios tonos el color natural de tus dientes, mejorando tu sonrisa estéticamente.
Si resides en Barcelona, lo tienes hecho. En el enlace referenciado cuentas con grandes profesionales a tu servicio, que te harán un estudio previo y te darán toda la información que necesites, así como un presupuesto sin compromiso.
Si este no es el lugar donde vives en la actualidad, te vamos a dar unos consejos a tener en cuenta a la hora de decidirte por este tipo de tratamiento:
Recuerda que un blanqueamiento dental es un tratamiento odontológico, no es un tratamiento puramente estético que se puede hacer en cualquier lugar. Es decir, tienes que tomar las medidas necesarias, ya que es un procedimiento que consiste en modificar el color de los dientes, haciéndolos más claros y que sólo debe ser efectuado por un dentista colegiado, que será además el encargado de decirte los requisitos previos de salud que debemos cumplir.
El odontólogo, y sólo este especialista, será el que seleccione la técnica a utilizar: tratamiento en la consulta o en casa, aplicándose los blanqueadores que este le prescriba, y siempre bajo el control estricto por parte del dentista, que irá evaluando todo el proceso y siguiendo su correcto desarrollo con consultas semanales o cada quince días, dependiendo del caso.
El profesional debe realizar un diagnóstico previo, asegurándose de que no hay peligro ni para las encías, ni para los tejidos blandos, ni para los dientes. Debe ser el que compruebe que todo se hace adecuadamente, que no se está utilizando demasiado producto, en caso de realizarlo en casa, y que siga el tratamiento de forma directa.
No es doloroso. Es posible que algún paciente, con mucha sensibilidad, pueda sentir un leve dolor o malestar, pero se podría comparar con la sensibilidad a un helado o a una bebida muy fría. Además, sabiéndolo se puede tratar para que no suceda o controlarlo, en la medida de lo posible, para evitar que vaya a más o que llegue a ser realmente molesto.
Se dice que este tratamiento puede llegar a dañar el esmalte, pero si el blanqueamiento se efectúa de forma correcta, siguiendo las instrucciones del odontólogo y empleando un producto seguro, sometido a una estricta regulación sanitaria, no es peligroso ni daña el esmalte en ningún caso.
Estas consideraciones son las principales que debes tomar en cuenta para que tu tratamiento de buenos resultados y cumpla tus expectativas. Un mito que nos vemos en la obligación de destruir es el de las pastas blanqueadoras, pues a día de hoy no podemos comprar este tipo de productos ni en farmacias ni en grandes superficies, pues su aplicación debe ser controlada, como ya hemos dicho, por un odontólogo.
No obstante, sí que se comercializan dentífricos destinados a intentar devolver al diente su color original y ayudar así a disminuir el tono amarillento que, con el paso del tiempo, pueden adquirir algunas piezas dentales. También son utilizados con el fin de contribuir a ayudar en la eliminación de manchas superficiales sobre los dientes y a prevenir su aparición, así como a mantener su coloración natural.
