La desaparición del Centro Gallego de Buenos Aires

Es alarmante la insensatez y la inoperancia de las agrupaciones políticas que forman parte del Centro Gallego de Buenos Aires como canalizadoras electorales de la voluntad social según se establece en los estatutos. La histórica institución se hunde y nadie hace nada para evitarlo. ¿Es así o hay grandes intereses en juego que no son del conocimiento de los asociados?

Cuando queremos comentar sobre la crisis en el Centro Gallego de Buenos Aires hay algo que nos deja totalmente perplejos. Me refiero a la ausencia de notas en la prensa gallega y al total hermetismo sobre el tema por parte de las autoridades competentes en Galicia que actúan como si nada pasase desconociendo que las autoridades electas quedaron separadas de la entidad por orden judicial. No es un tema menor que se hunda una de las entidades gallegas más importantes del mundo por su patrimonio y por su rica historia cultural. No es un tema menor que miles de gallegos pierdan su mutualista de asistencia sanitaria.

¿Qué está pasando realmente? Los que no mascamos vidrio somos de la opinión de hay una estrategia orquestada por los dirigentes del Partido Popular en la capital porteña para echarle la culpa de todo al actual gobierno argentino. ¿Para qué se hace esto? No siendo adivinos pero tampoco ciegos, podemos vislumbrar que detrás del escenario está moviendo hilos el ex candidato -apoyado por el presidente Núñez Feijóo- que perdió las últimas elecciones ganadas por Carlos Alberto Vello.

Dicen los que saben que la idea era poner al peón de Seoane al frente del Centro Gallego para desde dentro ir avanzando en la privatización de los servicios de atención médica. ¡Acá está el jugo de la naranja! Un candidato que es intermediario con las Obras Sociales -algunas están controladas por mafiosos amigos de Moyano- se presenta a las elecciones. Un plan perfecto que falló porque los socios prefirieron la honrada trayectoria de Vello. Algo debe de haber cuando inmediatamente de asumir Vello lo empiezan a criticar y a dejar sin apoyo al dimitir los representantes de tres agrupaciones. Ningún reconocido dirigente del Partido Popular intermedió delante de la Xunta para conseguir una ayuda de urgencia o un préstamo reintegrable. Todos se sumaron para quemar a Vello que dimitió antes de que el corazón se la jugase.

Ahora está intervenido y todos unidos en contra del Sr. La Blunda porque es un “montonero” amigo de la ministra Kirchner y de la presidenta Fernández. Las agrupaciones no re reunieron con él para ofrecerle ayuda para sacar adelante un grave problema en un campo de batalla que le es ajeno. Al contrario, desconocen la autoridad del interventor judicial y nombran a la ex directiva Donsión como representante en la Xunta de Galicia. ¡Increíble! Muy triste y lamentable el cortarle la mano a quien te está ayudando. Es el gobierno argentino el paga los salarios mediante una subvención del INAES de 8.000.000 pesos. ¿Lo hacen así porque son macristas?

Espero no equivocarme pero creo que no estamos hablando de ideología política. Estamos hablando de la peor clase de gente posible que es aquella que se vende por guita. Es evidente que hay unas 50 personas -no son más- que están persiguiendo el acomodo en OSPAÑA que es la empresa que busca quedarse con las 400 camas del Centro Gallego sin poner un mango. Los hijos, sobrinos y nietos de los dirigentes de las agrupaciones pasarán a ser contratados por OSPAÑA porque los actuales trabajadores quedan sin empleo. El negocio es maravilloso al conseguir gratis un hospital bien situado y conocido. Me duele lo que está pasando y solamente lo puedo presentar para ver si la gente honrada de la colectividad despierta de la larga siesta y defiende el patrimonio de los viejos emigrantes fundadores.