Opinión en Galicia

Buscador


autor opinión

Editorial

Ver todos los editoriales »

Archivo

Argentina ¿Cómo estás?

martes, 26 de febrero de 2002
Hola Argentina, ¿cómo estás? Me han dicho que estas mal, que estas en estado terminal, pero yo no lo creo, me cuesta entenderlo.
Como puede ser si tienes todo: campos, buen clima, playas, montañas, bosques ¿cómo? Que no es eso el problema? Y entonces ¿por qué te sientes mal? Me dices que es por que estas perdiendo fuerzas, pero eso es imposible si hasta hace poco tiempo estabas arriba en la escala del mundo o eso era lo que me hacían creer a mí? Dices que si ¿pero como pudieron mentirme? ¿Serian capaces de mentir tanto? Si yo los vote y les creí ¿cómo pudieron hacerlo?
Sabes Argentina, hoy que estoy aquí contigo en la sala de este hospital quiero contarte algunas cosas que nunca te dije. Nací en el 63 en el siglo pasado, viví una parte de mi infancia jugando a la pelota y a las escondidas, cuando todavía la TV era en blanco y negro, cuando mirar a los tres chiflados y llegar tarde al colegio era una tarea cotidiana.
Recuerdo a mi madre con la leche preparada cuando llegaba del colegio, donde al entrar cantábamos el Aurora en honor a la bandera, celeste y blanca que cada día se veía mejor, donde cantar el himno era poner la voz de un hombre que no éramos, donde aprendimos tu contorno de tanto dibujarlo en cuadernos de 24 hojas que se rompían de tanto borronear.
Aprendimos donde estaba la Cordillera de Los Andes, los ríos y las luchas que tuvimos para ser libres, dibujábamos la casa de Tucumán y entre sujetos y predicados, con recreos de por medio, la escuela iba siendo pasado.
Tuvimos distintos gobiernos, peleas internas y hasta una guerra estúpida hecha por un general trasnochado, donde nos decían que íbamos ganando, pero no era así, muchos hijos tuyos quedaron para siempre enterrados en esas islas que figuraban en el mapa con nombre extranjero.
El tiempo fue pasando, me fui haciendo grande y fuerte todo lo contrario de mis padres que se hacían cada vez mas chicos y con pelos blancos, los cuales acariciaba.
Hoy, ya no están y los extraño un día de esos se fueron a dormir en el rocío y a pesar de no tenerlos mas conmigo a veces les cuento mis cosas como en esas mañanas que no volverán. ¿Sabes Argentina? Los tenes vos en tu tierra, por eso te quiero, porque les diste todo, el trabajo, las alegrías, las penas y el lugar donde descansar.
Hoy estás sufriendo por la mala alimentación que te dieron, por los golpes, derrames de sangre y todo eso junto te hizo mal y yo sufro porque aquí nacieron mis hijos y como les voy a decir que nos tenemos que ir, yo que al más grande le inculque el amor por esa camiseta argentina de fútbol que tanto queremos, la cual nos hizo tan felices en otras épocas.
¿Sabes? El otro día recorrí muchos lugares de mi infancia y los olores no cambiaron, parecen mejores ahora, aun hay nombres grabados en arboles de aquella primer novia, todavía está la casa de mi infancia, y no puedo dejar de llorar cuando la veo, ahora que ya no es mía, ¿cómo voy a poder vivir sin tí? Si sos parte mía Argentina.
Hoy tengo un pasaporte que me dieron de otro país que nos abre los brazos, es el mismo del cual vinieron mis padres, el que dicen que es nuestra madre patria. Cuentan que tienen trabajo, viven dignamente, tienen un futuro por delante y viven con ilusiones, esas mismas que nos quitaron los que te hicieron el daño a vos.
Pero no logro entender como no nos frenan, te estamos dejando y aunque parezca fácil, no lo es, porque vos no diste todo, pero no podes mas, porque casi nada te pertenece. Los que dicen ser médicos te pronostican años de mala salud, pero entendeme Argentina, no puedo quedarme a esperar, mis hijos son chicos aun y quiero darles lo mejor, una infancia que al menos recuerden bien, un estudio, y un porvenir, el mismo que nos robaron. Estoy cansado de luchar en vano, que se me cierren puertas, que no haya posibilidades de crecer, de inseguridad, de hambre, ¿pero no era que estabamos en el primer mundo?¿ Porque me mintieron y nos mintieron tanto? ¿Dónde están ahora, los que se creían reyes?, Los que estaban de fiesta permanente mientras nosotros mirábamos desde afuera.
Sabes una cosa Argentina? pensé que iba a ser más fácil, pero te miro y no tengo la solución, estás desgarrada por dentro con luchas internas las cuales no podes dominar. Dicen que va a costar mucho sacarte ese virus político, así le llaman, al que te afecta, hasta ahora lo combatieron con un remedio llamado cacerola, pero lo tenes muy ramificado y él pronostico sigue siendo reservado.
Te prometo algo: siempre te voy a tener en mi corazón y desde el lugar que este voy a recordarte y enviarte un mensaje en una botella de alguien que tuvo que dejarte, porque no tuvo mas remedio.
Perdóname, como ya te dormiste, me voy, tengo los ojos hinchados de llorar, solo quería decírtelo.
Marcote Ballón, Norberto Ramón
Marcote Ballón, Norberto Ramón


Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora


PUBLICIDAD
ACTUALIDAD GALICIADIGITAL
Blog de GaliciaDigital
PUBLICACIONES