Opinión en Galicia

Buscador


autor opinión

Editorial

Ver todos los editoriales »

Archivo

Cuando Gadafi ninguneó a Fraga

lunes, 12 de septiembre de 2011
Esta es una película real de guerra. Sí, como dijo Octavio Paz, “la ceguera ideológica impide pensar”, pero a mí me parece que te confunde más aún la manipulación informativa que se crea a propósito de los muchos intereses que confluyen en Libia.
Tanto por la derecha como por la izquierda.

A ver. Leo en “El Universal” de Caracas:
“A los simpatizantes del régimen chavista que no están obnubilados, como el líder máximo, por la ceguera ideológica, el antiyanquismo visceral y la disonancia cognitiva, les debería dar vergüenza apoyar a quien el mismo Marx hubiese llamado “déspota asiático”, acusado por el fiscal de la Corte Penal Internacional de crímenes de lesa humanidad. Gadafi es un terrorista confeso, ya que entregó a la justicia británica a los que, bajo sus órdenes, hicieron estallar el avión de Pan American en Lockerbee y aceptó pagar la millonaria indemnización a las familias de las víctimas”.

Y entonces me viene a la memoria cuando Manuel Fraga, presidente de la Xunta de Galicia, se fue de visita a Libia y no solo persiguió a líder del “país del petróleo” por todas sus “haimas”; sino que realizó, además, aquellas famosas declaraciones en las que llamaba a Gadafi “gran estadista” y afirmaba que “el suyo era un gobierno amigo”. El entonces presidente libio ninguneó a Fraga.

Pero Fraga, no fue el único en visitar la “haima” de Muamar El Gadafi. Tras él desfilaron por Libia otros líderes políticos de España, Italia, Francia, Alemania, Inglaterra y Estados Unidos, que recuerde en este momento. Y todos coincidieron en lo de “gran estadista” y en las “estupendas relaciones de su gobierno”.

De esto hace bien poco, cuando ya era tercer milenio y Gadafi llevaba 30 años en el poder… ¡Y, claro, estaba de moda como exótico mandatario que era!

Ahora Gadafi, “exhausto y vencido por el ejército opositor”, que dice el parte de guerra, es para todos estos estados, incluso para China y Rusia, el malo malísimo de esta sangrienta película.
— ¿Y los que le vendieron las armas son los buenos?

Hay unos cuantos países “revolucionarios” de Latinoamérica que, mira por dónde, sus líderes se alinean en el derrotado equipo de Gadafi y afirman que los que “están liberando” a Libia no son opositores políticos, sino paramilitares financiados por la mismísima CIA americana que, ya se sabe, siempre aparece como “madre de todas las batallas”.

La gente de derechas de mi país siempre dijo que esta posibilidad era imaginada por el antiyanquismo viejo; tan viejo como distancia hay entre lo actual y la olvidada guerra de Vietnam, una contienda que la izquierda no olvida ni olvidará jamás.

Los gobiernos “revolucionarios” de América insisten en mantener su reconocimiento al régimen de Gadafi, aún hoy, cuando Gadafi ya no controla la situación en su país y mientras la ONU y la mayor parte de los países que a ella pertenecen han reconocido ya al Consejo de Benghazi como el gobierno libio de transición.

Y entonces, pregunto yo: Si Libia fuera Somalia… ¿Tendría esa guerra tanto interés informativo en el mundo…?

Porque hoy me he leído una veintena de periódicos de otros tantos países… ¿Sabes? ¡Ninguno de ellos hablaba ni de Somalia ni de la hambruna africana!. ¡Y todos contaban lo de Libia!

Epílogo, tras llenar el depósito de mi coche de gasoil a uno coma veinticuatro euros el litro: Somalia nunca será Libia… ¡Porque no tiene petróleo!
Rodríguez, Xerardo
Rodríguez, Xerardo


Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora


PUBLICIDAD
ACTUALIDAD GALICIADIGITAL
Blog de GaliciaDigital
PUBLICACIONES