José Mourinho, de héroe a villano

José Mourinho en acción

Llegó como el héroe que iba a conducir a la gloria a ese Real Madrid que presume de ser un “club señor”, de los de toda la vida, de esos que tras una camiseta esconden los más altos valores del deporte, si parafraseamos a los últimos secretarios de estado de la materia. Pero mucho me temo que, en este momento, está muy lejos de ser el ídolo que buscaba Florentino Pérez y ya es, utilizando el término empleado por el prestigioso comentarista Manolo Lama, -nada sospechoso de ser del F.C. Barcelona-, “un auténtico macarra”.

Hablo de José Mourinho, el “trainer” que vino a España como un “gentleman” y se convirtió en un vulgar chulo al que solo defiende ese sector del madridismo comúnmente llamado “forofada”.

Lo ocurrido hace unos días en el Nou Camp es un lamentable espectáculo que tiene varios responsables, pero eso ya os lo han contado por activa y por pasiva todos los periódicos del mundo, incluido “A Bola”, de Portugal, que abría su edición del pasado día 18 de agosto con esa foto en la que, “o mellor preparador do mundo” metía un dedo en el ojo del segundo entrenador del Barsa, Tito Vilanova.

Sin embargo, con toda la gravedad de este acto, hay asuntos aún más graves.

Uno de ellos fue la arenga que el técnico portugués dirigió a sus jugadores en el descanso, cuando iba perdiendo el partido de la Supercopa por 2 tantos a 1:

—- ¡No sois señoritas de compañía! ¡Sois hombres y además futbolistas! ¡Y si hay que dar leña, se da! ¡Y si hay que matarlos se les mata…!

Puede que estas palabras no fueran tan exactas como yo las escribo, porque son una transcripción de una conversación confidencial entre un periodista deportivo amigo y su “topo” en el vestuario del Bernabeu. Pero hubo arenga e invitación a la violencia y eso es mucho más grave que la vanidosa actitud en la rueda informativa postpartido o incluso el antideportivo hecho de que hubiera mandado retirar a su equipo del campo para que no presenciara como le entregaban la Supercopa al campeón.

En mi “Facebook” suscribí las palabras de Piqué: Mourinho está destruyendo el futbol español. Entonces aún no tenía la información de lo ocurrido en el vestuario y al final del partido.

Porque según el topo, tras la tarángana antideportiva que dio la vuelta al mundo y empañó uno de los mejores partidos de futbol que se pueden ver, bajó al vestuario el mismísimo Florentino Pérez.

¿Os creéis que lo hizo para recriminar la actitud del entrenador e incluso las de algunos jugadores? Pues, no, simplemente se limitó a felicitarles por “el excelente juego que habían hecho y para decirles que no merecieron el resultado final”.

Lamentable, este Real Madrid del siglo XXI, con Mourinho de amo y señor, como se vio en la Supercopa. Y lamentables las autoridades deportivas que permiten, no solo que dos clubes adulteren las competiciones españolas, permitiendo que los dos equipos más poderosos se lleven la mitad de los dineros que pagan las televisiones, si no que, para más inri, les conceden bula para el escándalo.

¡Menos mal que yo solo soy del Celta!. ¡Aunque al Mouriño presidente también le cunde! De él hablaré otro día…

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