Racismo patriótico

Acaba de morir a los 94 años Heribert Barrera, líder espiritual de ERC, supremacista según el cual los españoles eran inferiores a los catalanes, “como los negros lo son a los blancos”, lo que explica que Josep Anglada, xenófobo fundador de la Plataforma por Catalunya (PxC), lo haya homenajeado como gran patriota.

Las inexplicables son las alabanzas de los líderes democráticos catalanes a este expresidente del Parlamento autonómico, incluso los expresidentes socialistas de la Generalitat, al que en vida acusaban de racista.

A la vez, y con Cataluña como vanguardia de toda España, están apareciendo movimientos ciudadanos que denuncian la delincuencia creciente de extranjeros, mayoritariamente indocumentados.

Ante esta delincuencia comienza a olvidarse la corrección política progresista: el diario prosocialista El Periódico publicaba este lunes en sus primeras páginas, informaciones sobre “Manguilandia, Barcelona”, informando sobre los delincuentes extranjeros que perjudican gravemente a catalanes y turistas.

Señalaba sus orígenes/etnias: “Moritos”, “Bosnios”, “Rumanos”, falsos policías “Latinos”, y de otras nacionalidades, autores de la mayoría de los 310 hurtos, 37 actos violentos y 32 pisos asaltados de media diaria en Barcelona.

Delincuentes que entran y salen de prisión al instante gracias a las leyes buenistas, y que las autoridades no expulsan del país porque las oenegés convierten a estos malhechores en víctimas sociales.

Coincidiendo con la salida del diario catalán, sólo en Palma de Mallorca acaban de enfrentarse como si aquello fuera Tottenham decenas de nigerianos indocumentados, y gitanos, destrozando numerosos bienes públicos y privados.

Siendo los delincuentes españoles minoritarios, crecen los indignados que se unen al partido de Anglada, que espera obtener algún escaño en las elecciones del 20N: la ausencia de justicia, o su descomposición paulatina, crean la xenofobia.

Con la paradoja de que la izquierda y la derecha democráticas que condenan a Anglada justifican también el racismo de Heribert Barrera homenajeándolo como “padre de la patria catalana”.