Tui: Ejemplo de permisividad mal entendida

Cuando vi el silencio cobarde y cómplice con los narcotraficantes en las Rías Bajas, sentí asco, rabia y ganas de renunciar a sentirme gallego porque no podía imaginar que mis paisanos pudieran ser tan pobres espiritualmente. Porque de la pobreza económica se sale, pero la espiritual denota una mezquindad o una ruindad que uno no podía imaginarla. Parece que la muerte de los drogadictos no iba con ellos y que defender a su juventud no era su obligación.
Todavía siento asco.

Y viene esto a colación porque estoy harto de la confusión de que es más bueno el que se calla, el que no se chiva, el que permite que se incumplan las leyes incluso regocijándose, el que esconde o ayuda al delincuente… que aquel que habla, que exige que se cumpla la ley, que se chiva, no para hacer daño si no para reclamar su derechos, que el que denuncia a quien sea preciso con el fin de que se cumplan las normas sociales. Y de estos polvos…

Dos muertos, veintisiete heridos de momento, llantos, casas destruidas y ahora aparecerá el responsable y será insolvente. Y vendrá la Xunta y pagaremos todos una catástrofe que pudo haberse evitado. Es un episodio más de la mala solidaridad y de la permisividad que se usa con el abusón que se pasa la leyes por el arco de triunfo mientras el ciudadano normal, es decir el que cumple con la leyes, tiene que soportar no tan sólo el gasto de esa desgracia, sino el continuo abuso de estos señores que incumplen las leyes.

Desde mi ventana veo con frecuencia como determinados señores de uniforme -no especifico más por temor a la ley Mordaza- pasan olímpicamente de cuantas tropelías puedan ver ya sea un coche mal aparcado ya unos fumadores en una terraza que incumple la ley… es fácil que le digan que ese no es su cometido . Aquí el caso es escaquearse. ¿Ustedes han visto alguna vez una inspección sanitaria para que se cumplan las leyes antitabaco? ¿A ustedes le dan siempre el ticket cuando pagan una consumición? Si ustedes son usuarios de una frutería y escogen la fruta ¿cuántos lo hacen con guantes?...podríamos seguir el relato de los cientos de incumplimientos diarios de la ley y de poco sirven éstas si sólo hay una parte de la población respetuosa con ellas.

Hartos estamos los demás de que pequeñas o grandes cosas queden impunes como cuando roban los peces de un estanque, o las farolas, o destrozan papeleras o queman contenedores o realizan pintadas en paredes públicas o privadas. Rara es la medida ejemplar entre otras cosas porque no se buscan como debieran a los responsables - hay policía para buscarlos- pero no aparecen o se van de rositas.

Acabamos de sufrir un triste episodio con resultado de muertos y para vigilar que esa pirotecnia fuese legal existen organismos a los que les está encomendada esa labor. Obvio resulta que sus responsables son ineficaces y que debieran pagar por su negligencia, pero me temo que una vez más se irán de rositas…y los muertos al cementerio. Algún racista dirá: total dos moros menos. Pero yo les deseo que Alá sea generoso con ellos y sirvan de ejemplo para mejorar las cosas.