Podemos definir las úlceras bucales como una pérdida de sustancia debido a causas múltiples. Por un lado, afectan en la superficie al epitelio de la mucosa oral. Por otro, afectan en profundidad al tejido conectivo que subyace.
La etiología es múltiple, pero la clasificación más actual las divide en los siguientes tipos:
· Úlcera traumática.
· Úlcera cancerosa.
· Úlcera medicamentosa.
· Úlcera sistémica.
Las dos primeras, la úlcera traumática y la cancerosa, son las más importantes en cuanto a la frecuencia y a la gravedad, respectivamente.
Hay que tener en cuenta que todos los tipos de úlceras, si no se tratan de manera adecuada por el especialista, o si se combinan con el tabaco, el consumo de alcohol y otros agentes irritantes de la mucosa, pueden evolucionar a un cáncer oral.
Lo más importante es tener presente que toda úlcera que no desaparezca en 15 días después de que se haya eliminado su posible causa, debe ser biopsiada y estudiada anatomopatológicamente. Además, este procedimiento debe ir acompañado de una exploración de los ganglios linfáticos tanto submaxilares como cervicales.
Como resumen, podemos decir que una úlcera traumática a causa de una prótesis mal ajustada o debido al mordisqueo, si se le suma la intervención de agentes irritantes como pueden ser el tabaco y el alcohol, con el tiempo es muy posible que el paciente pueda llegar a desarrollar un cáncer.
Por el Dr. Jesús Eladio Regules Muñoz, miembro de Saluspot y odontólogo en la Clínica Dental Dr. Regules.
