El Brexit

¡Cómo no iban a abandonar los británicos la Unión Europea, si Europa no ha sido capaz de integrarse en el Reino Unido!

Es cierto que los del continente han hecho un gran esfuerzo, aprendiendo inglés, poniendo música cantada en inglés en todas partes en detrimento de otras músicas excelentes como las canciones en español (un idioma que ya hablan más de 500 millones de personas), promocionando al máximo las bandas roqueras británicas e incluso cantando en inglés pero, en 43 años que llevan los británicos en la UE, los europeos no han sido capaces de circular por la izquierda, utilizar la pulgada, el pie, la yarda, la milla, la onza, la pinta, el galón, la libra y el acre; además, para colmo, en vez de utilizar la libra esterlina se inventaron una nueva moneda: el euro.

Así no hay manera, el continente se lo ha buscado y es lógico que los británicos, hartos de esperar por la integración de los europeos, se hayan ido.

Quizás por nuestros orígenes celtas, los gallegos y los británicos tengamos algo en común (nosotros también tenemos unidades de medida propias, como el ferrado y la fanega), por lo cual y aunque no venga a cuento, me gustaría proclamar:

¡Viva la costa de Cornualles,
el Arzobispo de Canterbury,
el Obispo Santo y la Playa de las Catedrales!