Dimes y diretes

‎Los Mentideros de Madrid viven estos días de la rumorologia. A falta de pan buenas son tortas, parece ser el lema de Mariano, Albert, Pedro y Pablo.

En la era de internet se sopesan los mensajes, los guasapitos y los tuits. Se sospecha que hay citas clandestinas, junto a las pregonadas a los Cuatro vientos.

Pedro, el guapito Machoman nacional tiene el corazón "partío" como en la canción de Alejandro Sanz, no sabe que hacer de su idilio con el chico sensato de Hospitalet y se debate en un mar de dudas frente a las exigencias de El Coletas, el encantador de serpientes de Soria. Con sus asesores habla y habla sobre como abrir su matrimonio con Ciudadanos y ampliarlo a Podemos. Sabe que si no lo consigue, la fontanera prodigiosa, la trianera Susana puede relegarlo a su anterior puesto de oscuro diputado, de corre turnos, de hombre florero para solaz de las militantes. Tiene que formar gobierno cueste lo que cueste y alcanzar los prados verdes del Eliseo. A veces su bella mujer y sus colaboradores más cercanos le sorprenden silbando una melodía "Si yo fuera rey", para no dar sus cuartos al pregonero lo disfraza de "Los doce cascabeles" de Manolo Escobar que le parece más canción de cambio y de progreso. El mantra que repite machaconamente, venga o no a cuento, incluso cuando quiere un filete en una tasca de menú lo pide de cambio y de progreso al sorprendido tabernero. "Marchando un filete de cambio y de progreso!" y la Sra Angelita se las arregla para presentar una carne apetecible.

Asi transcurren las horas y los días del infatigable Pedro, que a falta de argumentos y de ideas bucea en las ambiciones humanas y tantea una y otra vez las ocultas intenciones de un Pablo con la lección muy bien aprendida para conseguir la subversión social, levantar a los desheredados para aupado a sus hombros conjurar los viejos demonios, para el ángeles caidos, del anarquismo clásico español. Se sueña un Bakunin renacido en Soria, que pondrá patas arriba la piel de toro y provocará un bello estallido social a la cubana y venezolana.

Tanto Pedro como Pablo se han visto ninguneados por la gran dama del momento, la sin par Isabel, la mujer más famosa del Hola y de las Españas, con su elegante bardo muy cerca de ella y hechizado por sus efluvios filipinos. Pues bien, Isabel no los ha invitado al 80 aniversario de su bombón Nobel.

Mientras medio mundo se estremece por los atentados de los ambiciosos y descerebrados yihadistas, nuestros mediocres líderes naufragan en la ciénaga de su impotencia. El simple Mariano con tantas horas de navegación habla de cinco puntos, Pablo se limita a dos: su emergencia social y su hambre de cargos. Albert y Pedro exploran ampliar sus doscientos puntos, el desparrame y el despiporre de sus programas.

Dimes y Diretes en la Villa y Corte de Madrid, donde hasta la Cibeles se asombra de la alcaldesa que le ha tocado como vecina, desearia marcharse de su Plaza y trasladarse al Obradoiro gallego cerca, muy cerca, del Sr Santiago.

Asi se han acabado los idus infructuosos de marzo en que cuatro personajes buscan, sin lograrlo, su inspiración y al final se adivina, se entrevé el esperpento.

(Joaquin Antuña es Presidente de Paz y Cooperación).