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El rescate de Alemania

lunes, 14 de septiembre de 2015
El holocausto y la persecución de los judios, la noche de los cristales rotos, las leyes raciales,los campos de concentración y de exterminio, la pureza racial, la liquidación de las razas inferiores, el sueño de la nación aria,la supresión de las libertades civiles, el repudio del arte degenerado y la quema de libros son todos ellos fantasmas que pueblan las mentes de los alemanes y son sus cadáveres en el armario.

Durante años se habló de la Umbewaeltigenvergangenheit,de la memoria imposible de digerir
y mucho menos de aceptar. Quien vivió en Alemania en los años 60 sabe que todos los medios de comunicación se volcaron en desvelar el pasado sin hurtar imágenes y relatos espeluznantes.El nunca jamás resonó con fuerzas en los discursos de todos los líderes políticos de la CDU, del FPD y del SPD,es decir democristianos, liberales y socialdemocratas. Ello repercutió en una política de Versoehnung o Reconciliación con su
pasado, que se tradujo en apoyo a Israel en todas las instancias internacionales y denuncia de todos los criminales del nazismo.

En España se podría trazar un paralelismo con la política de reconciliación del gobierno vasco y las víctimas del terrorismo. Las raíces étnicas del drama alemán se repitieron en los Balcanes. Recordemos Srebrenica. Ruanda fue otro capítulo trágico. Volviendo a Alemania y abandonando el bosque sangriento de las superioridades raciales que se mueven entre lo criminal y lo grotesco, es indudable que la vida de la posguerra ha sido condicionada en Alemania y Austria por su pasado nacionalsocialista y ahora se están superando las páginas de las sucesivas etapas de horror, de perdon, de reconciliación pasando a la de reparacion.

Los voluntarios austriacos que acogen con flores y alimentos, amistad y apoyo a los refugiados sirios son descendientes de aquellos austriacos que saludaron con entusiasmo y el
brazo en alto a las tropas alemanas que sellaban la Anschluss, la unión con
Alemania en la gran Germania en 1937. La actitud de Angela Merkel, ese demonio con cuernos para Syriza y Podemos, de planear aceptar hasta 800.000 refugiados es una muestra de la voluntad de reparación del pueblo alemán y de convertir a Alemania en una patria de las libertades, lo que fue Francia para los refugiados del mundo y Estados Unidos para los emigrantes por razón de intolerancia religiosa, politica y hambre.

El Papa Francisco con su política de demos un apoyo "concreto" y su apertura de parroquias e instituciones religiosas a los refugiados muestra la voluntad de la Iglesia católica de proteger a los cristianos amenazados de exterminio y lo hace sin hacer distinciones de credo. El Vaticano juega un papel fundamental en la política italiana por lo que condiciona su actitud respecto a los refugiados.Se establece así un Pacto de Caridad,que es solidaridad con amor, entre Alemania e Italia. Es de esperar que contagien a la Unión Europea, aunque las motivaciones sean distintas y nadie niegue un apoyo al refugiado para lo que es necesario una labor seria y profesional de coordinación y un gran esfuerzo de gestion, que si se hace para organizar unos Juegos Olímpicos también se puede conseguir para resolver una crisis humanitaria.

De momento, creo que hay que alegrarse por la política alemana de acogida a quienes huyen de la guerra y de las persecuciones religiosas y politicas. Hemos pasado de la gran elocuencia desbordada wagneriana a la música de Mozart, que apela al hermanamiento, a la armonia y a la luz .

Refugiados y Religión

La ola de solidaridad que conmueve a Europa esta movilizando a la sociedad con -a la cabeza-, para buscar un símil deportivo, al Papa Francisco, este Papa social, que ha abogado por abrir los brazos a los refugiados empezando por el propio Vaticano.

Papa Bergoglio, como se llama en Italia a los Papas, llevaba tiempo anunciando la persecución que sufren los cristianos comparándola a la que padecieron en los tiempos del Imperio Romano y ahora al hacerse visible la crisis humanitarias cuando la corriente migratoria se desplaza hacia el centro de Europa, Francisco se convierte en el abanderado de los refugiados y moviliza a su Iglesia relanzando una nueva Acción Catolica, que había lanzado Pio XI y posteriormente el Concilio Vaticano II, ante la descristinazacion de la sociedad y el avance del laicismo, pero ahora Francisco impulsa el lado social de la Iglesia Católica,que redescubre con fuerza el amor al prójimo en el pobre, en el perseguido, en el emigrante. Ademas Papa Francisco abandona la ambiguidad de apoyar a los poderosos y perderse en los nacionalismos y en imitar a Poncio Pilatos lavándose las manos como hacen sin ir tan lejos los obispos catalanes.

Francisco es rotundo en condenar las injusticias y ha puesto en pie a su Iglesia, que ha encontrado una gran causa y que esta vez no trata de conservar, sino apunta a transformar, a cambiar la sociedad. No contra Galileo Galilei, sino a favor del futuro.

Desde la otra orilla la del laicismo, se levanta también el estardante de apoyo a los refugiados. El welcome refugees de Carmena y Colau, las alcaldesas indignadas de Madrid y Barcelona intentando resucitar el socorro rojo de los años treinta y agitar las aguas de la indignación culpando al sistema económico y a todas las castas, lo que en inglés se llama el establishment, de los males del siglo.

Han topado en estos generosos esfuerzos con el entramado de organizaciones humanitarias nacionales y sobre todo internacionales. Esta claro que Cruz Roja, ACNUR y UNICEF les llevan la delantera. Lo que no se está reflexionando en medio del tsunami de personas desesperadas que buscan su salvación en Europa es que los refugiados tienen religión y la practican y que su integracion aumentara la presencia cristiana y musulmana en los países de acogida, por lo que chocan abiertamente con la indiferencia de la sociedad del bienestar y la hostilidad manifiesta de ateísmo militante de los indignados radicales y en el caso de España se llega a extremos de no respetar las tradiciones seculares y de preferir el orgullo gay y el culto a los animales, que son causas muy respetables, pero que no deberían significar el rechazo a la religion.

Con los refugiados llegan a Europa quienes invocan a Dios y a Ala y no nos equivoquemos impulsarán el sentido religioso e introducirán semillas de fe en los actuales campos yermos. Ahora es el momento de la mano tendida, de los esfuerzos de todos, de ayudar a quienes escapan del horror de la guerra y de la persecución religiosa y politica, luego será el momento de la reflexión y de los nuevos rumbos impulsados por la presencia de la religion.

( Joaquin Antuña es Presidente de Paz y Cooperación)
Antuña, Joaquín
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