El libro de Albert Rivera, su tarjeta de visita para este año electoral de 2015 fue "El cambio sensato" y este adjetivo del bon seny catalán le viene como anillo al dedo a este abogado barcelones de impecable presencia de ejecutivo de multinacional que se especializó en la oratoria, lo que implica forma y contenido y que tiene una arrolladora pasión politica.
Su caballo de batalla es la regeneración de la democracia española surgida de la transición, que ha estropeado y envilecido su trayectoria con multitud de escándalos de corrupción.
Cree Rivera,el chico sensato y aquí puede demostrar inocencia e ingenuidad que los españoles pueden convertirse en daneses y que las reglas de juego de los países nórdicos pueden aplicarse en un país latino plagado de pillos y ventajistas, de buscadores de subvenciones y privilegios a la Indiana Jones y sobre todo impregnados de una cultura familiar que propicia el nepotismo y el amiguismo.
Albert nos quiere regenerar y mostrarnos como el Dante "la retta via"la que nos llevará a ser ciudadanos ejemplares. Indudablemente este intrépido barcelonés, que se mostró como Dios lo trajo al mundo en su primera campaña politica, bebe en las fuentes del regeneracionismo de Joaquín Costa y su famosa "escuela y despensa"y de pasar página echando "siete cerrojos al sepulcro del Cid".
Albert en sus mítines habla sosegadamente y sin estridencias, no se enardece como el Divino Pedro, ni es telepredicador como el Coletas encantador de serpientes, ni en plan pater familias como el Padrastro Mariano, sino que es breve, claro y didactico. Dice verdades como puños como si estuviera dirigiéndose a una Junta de Accionistas. Sentado en un taburete se le ha visto desgranando su mensaje del cambio sensato en el Teatro Goya, su Teatro de la Comedia, en el Compac de la Gran Via o en el castizo Teatro de La Latina.
Un beso Lina y gracias por lo mucho que nos has divertido.
Su partido reconvertido de Ciutadans en Ciudadanos se organiza como una multinacional con una dirección muy preparada que de arriba a abajo estructura un partido lanzando directrices y utilizando al máximo la vía digital. Por esta razón justifica su nombre al ser un partido citadino como gustan decir nuestros hermanos mexicanos y de cuadros. Sin el soplo regeneracionista podría ser un partido de tecnocratas, pero Albert y sus huestes tienen una misión que cumplir devolver Cataluña a la cordura y racionalizar España. En Madrid y Barcelona, sus focos neuralgicos, tiene dos jóvenes damas muy interesantes, Inés Arrimadas, lastima de nombre que resuena a culebrón y Begoña Villacís una chamberilera guapa y castiza que podría interpretar a la Mari Pepa de la Verbena de la Paloma, a la que por cierto si honró a diferencia de su alcaldesa, la jueza de las ocurrencias.
Ines y Begoña son dos estupendas profesionales rodeadas de un partido bastante joven, con una muchachada pulcra, aseada y entusiasta, en el que abundan los profesionales, los autónomos y los técnicos, gente toda que no necesita vivir de la política a diferencia de otros partidos en que es un trampolín para la supervivencia.
A partir de cierta edad no se debería votar a nadie que no haya sabido prosperar y defenderse en la vida. Un aluvión de afiliaciones ha hecho necesarios filtros y cautelas tipo Recursos humanos y a la larga les será necesario dar una formación a muchos afiliados unidos únicamente por el deseo de limpieza, pero sin formación política elemental.
Rivera tiene ante sí una dificil, pero ilusionante misión "desfacer entuertos" y liberarnos de villanos y otros "follones". Su prueba de fuego son las elecciones catalanas, pues un buen resultado podría catapultarlo a Albert y sus muchachos a un horizonte similar al de la heroína de Borgen, la extraordinaria serie politica danesa, la indignación sensata esta servida, que Dios reparta suerte.
(En la foto, Sofía Miranda concejala, junto al autor y Begoña Villacís, Concejala y portavoz, ambas del Ayuntamiento de Madrid)
Pan y morbo
En el siglo primero Juvenal consagro el lema Panem et Circenses, en castizo Pan y Circo, que en la época gloriosa del Real Madrid y Don Santiago Bernabeu se convirtió en Pan y Futbol.
Los tiempos cambian y como en la zarzuela La Verbena de la Paloma "Hoy los tiempos adelantan que es una barbaridad" y el hoy futbolero ha cambiado la camiseta blanca por la roja de la selección y la azulgrana del Barsa. Es decir que, amigo Juvenal, sigues teniendo razón. Sin embargo la primera parte de tu famoso slogan ha cambiado. Si, no frunzas el ceño ni te retuerzas en tu tumba. Te lo explicaré.
En tu Hispania del Imperio Romano de tus Césares y de la Pax Romana que imponía Augusto se entretenía a las masas con tu pan y tu circo, pero los tiempos han pasado y en tu Hispania ha habido una época de gran abundancia y prosperidad en que el pan se dio por descontado y su reclamo ya no atraía a las multitudes, incluso se desaconsejaba su uso, porque engordaba, ni más ni menos, por lo que había que sustiturlo por un pan inmaterial, algo que fuera muy adictivo y nos distrajera, nos enajenara.
No me levantes la voz querido Juvenal, tu no has leído a Freud, ni a Marx, probablemente te hubieras dormido, asi que has tenido suerte, pero volvamos al nuevo pan, al que nos enfrentamos todos los días cuando escuchamos y leemos, me refiero a la cultura del morbo, que crece dentro de nosotros como un "alien", un monstruo que nos va devorando hasta apoderarse de nosotros y convertirnos en un un ser que para alimentar su cerebro necesita de lo más abnorme, de lo truculento, de los asesinatos más viles, de las catástrofes cotidianas, de las corrupciones más vergonzosas, de las imágenes más descarnadas, de los esperpentos politicos, culturales y sociales, de las ejecuciones más horripilantes, de las teles basuras y de las radios más provocadoras con sus sacerdotes y sacerdotisas del escándalo que se nos sirve muy muy muy calentito, hirviendo. De la pornografia más cruda con los miembros más grandes y musculosos, con las relaciones más inverosimiles, el todo vale que va desde recoger las últimas palabras y sensaciones de un condenado al suplicio hasta vivir y recrear el espanto de tsunamis, maremotos, terremotos y naufragios.
El más difícil todavía del mundo de las sensaciones desbocadas y esto se nos sirve desde pulcros y bellos aparatos de una maquinaria que también nos pone en contacto con el conocimiento y el saber y nos ilustra sobre lo divino y lo humano, pero amigo Juvenal bebemos los maravillosos elixires, los brebajes y filtros de amor desde la libertad, sin esclavitud, que en tu Roma existían los esclavos y se imponía la voluntad omnimoda del Cesar, pero el hecho es que nos invade la cultura del morbo y frente a ella no podemos recurrir al palo y tente tieso, nos repugna la porra y las prohibiciones, ay! te has perdido a Voltaire, pide permiso a Jupiter, para que te deje leerlo, pero desde la libertad de elección tenemos que proveernos de máscaras antimorbo, tal vez los japoneses, los chinos o los coreanos las inventen, para no vernos atrapados sin remisión por el morbo, para impedir que como en La Metamorfosis de Kafka nos haya devorado por completo y ya no nos valgan ni Messi ni Ronaldo!Solo Morbo.
(Joaquin Antuña es Presidente de Paz y Cooperación).
