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Bienestar mental en verano

martes, 21 de julio de 2015
10 consejos para tu bienestar mental en verano


Se aproxima el verano y con él la oportunidad de desconectar, de salir de la rutina. Para algunos esto implica vacaciones y buscan momentos de placer y bienestar, pero a veces no se sabe muy bien cómo. Para otros, este momento representa la ocasión perfecta para que aparezca la ansiedad. Estos consejos de Agurtzane García Rodríguez, miembro de Saluspot y psicóloga en APYF Apoyo Psicológico y Formación, contribuirán a que las vacaciones sean una fuente de bienestar, empleando la psicología propia de cada uno con unas pautas que te ayudarán en tu decisión.

1. Elige un destino de vacaciones adecuado
Seleccionar el viaje puede ser más complejo de lo que parece. Para evitar sorpresas poco gratas cuando llegamos y poder disfrutar de esas merecidas vacaciones, es necesario tomar decisiones y centrarse en aspectos como: cuál es el objetivo de tus vacaciones (relax, aventuras, turismo…), con quién vas, cuál es el presupuesto y qué clima buscas.

2. No te preocupes del dinero
No siempre se dispone de un presupuesto muy amplio, pero esto no tiene que ser un impedimento para buscar ese espacio que nuestro cuerpo nos pide para rebajar nuestros niveles de ansiedad y estrés, y recuperar fuerzas. No te quedes sin tu momento, hay muchas alternativas para encontrar lo que necesitas sin gastar mucho dinero.

3. Comparte planes si viajas con tu pareja
Los planes deben consensuarse, sobre todo si son las primeras vacaciones en pareja. Ten en cuenta que ambos deberéis ceder en algunos aspectos y es aconsejable no limitarse a lo cómodo y conocido. Es posible que te sorprendas si pruebas cosas nuevas que te proponga tu pareja. Tampoco está mal plantear momentos de espacio para cada uno: quizá uno quiera ir al spa y el otro a tomar el sol. No pasa nada.

4. Elige opciones de entretenimiento para niños
Ten en cuenta la edad del niño, ya que eso determinará una serie de limitaciones. Puede ser conveniente elegir un lugar donde pueda estar entretenido y cómodo y se puedan cubrir sus necesidades, porque eso también repercutirá en un mayor bienestar para ti. Cuando lleguéis al destino, enséñale los diferentes espacios para que se familiarice con ellos.

5. No tengas miedo de viajar solo
Muchas veces nos quedamos sin viajar por no decir que vamos solos o por miedo, porque consideramos que no somos capaces, etc. Si tu opción es viajar en solitario, existen multitud de opciones y destinos en los que no es necesario ir acompañado. Además, viajar solo no significa que estarás solo.

6. Infórmate antes de viajar a países extranjeros
Conocer el tipo de comida, el clima, el tipo de moneda y cómo está al cambio (sobre todo si viajas con un presupuesto reducido) son aspectos que debes considerar antes de reservar un viaje a otro país. Infórmate bien de todo lo que necesitarás y valora después si realmente es el tipo de viaje que buscas.

7. Evita la ansiedad
La ansiedad es un problema frecuente y para algunos las vacaciones representan todo lo contrario a la tranquilidad, el disfrute y el bienestar. Para evitar la ansiedad, plantea las vacaciones de manera realista, sin sobrecargarte de actividades para pasarlo bien. Párate a pensar en lo que buscas y en cómo obtener la tranquilidad y el desahogo que necesitas.

8. Controla el miedo al avión y al barco
El miedo es adaptativo, nos avisa de un posible peligro y nos prepara para la acción. Pero no permitas que este miedo te impida viajar en avión, barco o cualquier otro medio de transporte. Si el miedo no es muy elevado, un buen método es distraerte durante el trayecto. En algunos casos será necesario que acudas a un especialista.

9. No te lleves trabajo
Llevarte trabajo pendiente de vacaciones te impide desconectar. Además, si vas acompañado puede que no llegues a cumplir los acuerdos a los que habías llegado con las personas con quienes viajas.

10. No caigas en la depresión posvacacional
Después de disfrutar, puedes evitar la depresión posvacacional con una planificación en la que propongas un retorno evitando agobios y prisas. Volver al trabajo supone un proceso de adaptación que, como cualquier otro, si se realiza de manera organizada y gradual resulta más sencillo volver a la rutina.


Por Dña. Agurtzane García Rodríguez, miembro de Saluspot y psicóloga en APYF Apoyo Psicológico y Formación.
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Las opiniones expresadas en este documento son de exclusiva responsabilidad de los autores y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de la empresa editora


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