Pablo Iglesias, un jacobino en el Ritz

El azote de «la casta» se asoma al hotel de lujo y de referencia de Madrid que promovió Don Alfonso XIII, que deseaba dotar a Madrid de alojamientos de gran clase.

Nuestro primer sans culotte atraído por su creciente fama de estrella mediática de las tertulias de Cuatro y sus brillantes resultados electorales parece no tener miedo al contagio de la casta y va a su templo a fustigar a los poderosos.

El viento de populismo que azota a Europa con Marine Le Pen en Francia, Amanecer Dorado en Grecia, Beppe Grillo en Italia y nuestros inefables demagogos de ERC en Barcelona ha encontrado su mejor paladín en Pablo Iglesias en Madrid. Estamos todos. La fiesta esta servida. Se abran los cielos y no dejemos títeres con cabeza. Se dispara verbalmente contra todo lo que se mueve. No se salva nadie. Esperanza Aguirre lo retrata como bolivariano chavista con un potaje mental de marxismo caribeño. Pablo mete los dedos a una sociedad en crisis y encuentra culpables a derecha y a izquierda. Incansable y con verbo caliente y gestualidad severa se ceba en todo lo que se mueve. El problema de Don Pablo del Ritz es saber a donde pueden conducir sus diatribas virulentas a instaurar una España castrista con un país empobrecido y con miles de jineteras o a rizar el rizo y conseguir la gesta sin par de Corea del Norte que era más rica que su hermana del Sur en el momento de la partición forzada de la península coreana y que en la actualidad es cuarenta veces mas pobre que Corea del Sur.

Extraordinaria «fazaña»!. Claro que para ello seria preciso volver a
poner de moda los fusilamientos en masa o la guillotina en versión castiza tal vez acompañándola de los compases de organillo en un emplazamiento a la moda en el barrio de las letras o en la mundialmente en boga Chueca. Como en la música de Verdi el látigo de Iglesias irá in crescendo hasta alcanzar su apogeo en el aria «Di quella pira» del Trovatore; se sentirá el primero, el mas grande jacobino en la corte del Rey Felipe VI.

El Hotel Ritz es el escenario mejor para entrar en la terrible casta y dejarse seducir por fama y honores Salve Pablo!.

(Joaquín Antuña es Premio Cooperación 2013).